Para muchos el mejor grupo de música pop en español de todos los tiempos, Mecano, viajó por primera vez a México en 1982. Ignacio de la Macarena Cano Andrés (Madrid, 26 de febrero de 1963), Nacho Cano, inició entonces, sin saberlo, una relación tan profunda con este país que lo llevaría a concebir el proyecto artístico más vehemente y ambicioso de toda su carrera. Hay que considerar que su hermano José María, también exintegrante de Mecano, compuso una ópera, Luna, estrenada en versión de concierto en 1998 por Plácido Domingo y Ainhoa Arteta en el Palau de la Música de Valencia. Y que el propio Nacho fue el creador del musical Hoy no me puedo levantar, estrenado en 2005 en España y en México al año siguiente, considerada la producción original en español más exitosa de todos los tiempos. No obstante, el musical Malinche rompe todos los moldes al punto que cuesta trabajo encontrar algo similar en los escenarios de Broadway, Las Vegas o el West End de Londres. Lo más parecido sería Jesucristo Superestrella, por la solidez y hondura de su argumento, y por su concepto estético avant-garde.
“Para hacer un musical debes reunir amor, drama, tragedia, lucha… todo lo que tiene la historia de México por mil”, apunta Nacho Cano sobre su creación. Y explica: “Para que la gente se interese en conocer mejor la historia tiene que amar a los personajes, y esa es mi función: que salgas del musical queriendo saber más de Malinche, de Hernán Cortés y de Moctezuma, que son los creadores de este país. Malinche es México en estado puro. La historia de México es mágica, es maravillosa. El día que los mexicanos la empiecen a entender, se van a querer mucho más”.
Tres personajes, como Mecano
El compositor y productor se refiere con mucha familiaridad a la intérprete nahua, el conquistador español y el tlatoani mexica, y se muestra deslumbrado ante lo conseguido por estos tres personajes. No en vano Mecano también era un trío. “Malinche es la mujer más importante en la construcción de América por su papel como madre del mestizaje y precursora del cristianismo. Moctezuma es un sabio impresionante porque fue el único que supo qué es lo que iba a pasar, y en consecuencia actuó lo mejor que pudo. El personaje de Cortés tiene una serie de características muy curiosas. Es muy creyente en Dios, tiene una gran confianza en que Dios está con él. Démonos cuenta de que al encontrarse Moctezuma y Cortés se están juntando el emperador más grande de América con el representante del emperador más grande del mundo”.
El proceso de identificación y enamoramiento de Nacho con el fenómeno del mestizaje fue paulatino. Su padre, Modesto Diego Cano, nació en Zalamea de la Serena, localidad aledaña a Medellín, la cuna de Hernán Cortés, en Extremadura. Pero fue hasta que vivió en Miami cuando comprendió la importancia y el alcance del mestizaje iniciado por Cortés. “No tengo dudas: de la llegada de los españoles a América ha habido más que celebrar que denostar”, se sincera el compositor y productor, para exclamar al fin: “México ha sido el mayor logro de España”.
“Hay una investigación basada en el trabajo de arqueólogos y antropólogos, como Diego Prieto o Antonio Saborit. Los datos históricos son certeros, aunque el formato es artístico”. NACHO CANO
Nacho Cano defiende el rigor histórico detrás de su proyecto: “Hay una investigación basada en el trabajo de arqueólogos y antropólogos, como Diego Prieto o Antonio Saborit. Los datos históricos son certeros, aunque el formato es artístico”. El madrileño se emociona al indicar que el musical se representa en un espacio próximo a donde se erigió el Templo Mayor, el Hospital de Jesús, fundado por Hernán Cortés, donde descansan sus restos, y al puente de Alvarado, donde se desarrolló la Noche Triste, la mayor derrota sufrida por el ejército de Cortés y sus aliados mesoamericanos.

48 metros de escenario
Mención aparte merece el recinto donde se realiza la representación, el Frontón México, la casa del jai alai en este país, lugar de lucimiento de dinastías enteras de jugadores o pelotaris. Inaugurado en 1929, fue la primera construcción techada dedicada a albergar eventos deportivos en la capital mexicana, en este caso, la pelota vasca. Y aquí convivieron armónicamente mexicanos y españoles durante décadas. A partir de 2017 se transformó en centro de entretenimiento para presentar espectáculos culturales y artísticos. Para la puesta en escena de Malinche se acondicionaron dos albercas escénicas que se abren y cierran sobre el escenario, con cascadas incluidas. El ancho del proscenio se amplió a 48 metros y se incrementó sustancialmente el número de butacas.
“Para la puesta en escena de Malinche se acondicionaron dos albercas escénicas que se abren y cierran sobre el escenario, con cascadas incluidas”.
Estrenado en la capital de España en 2022, el musical ha sido visto por 500 000 espectadores. En México, el estreno de gala se celebró el 30 de abril, aunque ya se habían ofrecido 31 funciones con un lleno total de 31 000 espectadores. Está previsto que las funciones de los domingos por la mañana se ofrezcan en inglés. “Queremos quitarnos el complejo de Broadway: el nuevo musical de México debe llegar a Nueva York. Y por lo pronto la obra viajará a Las Vegas”, comentó el compositor madrileño.
Malinche entendió el poder del lenguaje
Para la puesta en escena en México, Nacho Cano está acompañado en esta andadura por María Laura Medina de Salinas, productora ejecutiva, y el empresario español David Hatchwell. Los tres comparecieron en la conferencia de prensa previa al estreno, y coincidieron en la urgencia de resignificar a la Malinche como símbolo de amor, fortaleza y conexión cultural, y no como representación de la deslealtad con la que históricamente la han descrito.


María Laura Salinas dijo que es “un honor” ser parte del proyecto y reiteró el propósito de la obra de reivindicar a la Malinche en la historia nacional. “Cuando tuvimos la fortuna de conocernos los tres y ver la obra Malinche en Madrid, dijimos: ‘esto hay que compartirlo, hay que llevarlo al mundo, y hay que llevarlo primero que nada a México, para que la historia de la Malinche sea bien contada’ ”.
“Vamos a proyectar los atributos que merece esta mujer –continuó–, porque gracias a ella, a su capacidad de comunicar a su modo, pudo conectar a dos hombres que hicieron grande a este país”.
Previamente, durante la VII edición del Women Economic Forum, se había referido al papel de la Malinche en la historia de México: “Fue una mujer que entendió el poder del lenguaje y la negociación, que supo moverse en un mundo hostil y que con inteligencia y determinación se convirtió en protagonista de un cambio histórico”.
“Hoy como sociedad –continuó– nos toca decidir si seguimos viéndonos como víctimas o nos asumimos como protagonistas. Una nación solo puede avanzar si tiene confianza en sí misma, si se construye desde la verdad y no desde falsos conflictos. Nuestra fuerza está en nuestra identidad, y en nuestra capacidad de unir, no de dividir”.
La mano de María Laura Salinas es visible en numerosos detalles de la producción, que en la puesta en escena en Madrid simplemente no existieron. El estilo art decó del edificio del Frontón México luce en todo su esplendor, recordando los días de gloria del recinto en las décadas de los cincuenta y sesenta, y hasta el último rincón muestra evocaciones de buen gusto. El propio Nacho Cano tuvo palabras de reconocimiento para la labor desarrollada por ella al explicar que Malinchees el primer musical del mundo en el que no solamente se ha cuidado lo que el público ve y oye, sino que la experiencia incluye sensaciones recibidas a través del sentido del olfato. Y es que desde que los espectadores ingresan al recinto los recibe un exquisito aroma, que después trascendió que se trata de una versión del “huele de noche” desarrollada por Aromaria. Incluso durante la función, por los pasillos de la sala se deslizan sigilosamente edecanes portando cocos con hielo seco de los que se desprende la delicada fragancia.
“Detrás de esta figura histórica hay una mujer valiente, compleja, esencial para entender lo que somos hoy”. KARLA CENTENO
Una mujer valiente y compleja
Para Karla Centeno, actriz y cantante que en el estreno interpretó a la Malinche, encarnar el personaje ha sido por encima de todo algo transformador: “He aprendido que detrás de esta figura histórica hay una mujer valiente, compleja, esencial para entender lo que somos hoy”.
El cantante y actor español Dani Rosado, quien encarna a Hernán Cortés, comenta que el conquistador “tenía un punto de vista como el mío, ahora que vine a México: conocer, ver la cultura y beber de ella. Tanto los españoles como los mexicanos somos todos mestizos. El español también lo es, no hay uno por naturaleza, porque antes estaban los musulmanes en la península ibérica, y los visigodos. Estar acá y conocer a las etnias, pues hay 68 grupos étnicos [indígenas] actualmente en México, es ver esta tierra desde los ojos de la admiración, el respeto y el cariño sobre esta cultura tan rica, vasta y bonita que tenéis en México. ¡Es espectacular!”.
“La historia real es un tanto dura –prosigue Dani Rosado–. Por eso me gusta que Nacho Cano dibuje a Cortés no como un conquistador, sino como un explorador. El musical ensalza la celebración por la unión y el amor de estos dos pueblos, quienes seguiremos de la mano durante mucho tiempo y cada día con más fuerza. Este proyecto habla de la exploración de un mundo nuevo en los ojos de quienes recién lo estaban viendo”, añadió.
Moctezuma está a cargo de Alan Javier Hernández, originario de Ciudad Nezahualcóyotl. “Nacho me fue preparando en Madrid para tener la capacidad de presentar a este personaje en México –explica–. Vio en mí lo que podía aportarle al personaje, como mi cicatriz (en la coyuntura de los labios, debido a que mordió de niño un cable de luz). El canto, la actuación e interpretación los fui trabajando con maestros de cada rubro… Estar aquí representa algo muy importante para mí, porque en mi vida no había imaginado poder viajar a otro país, cantar y actuar, porque bailar ya lo hacía. Es un personaje imponente, por la relevancia que tuvo y tiene en la historia de México”.
Entre los más de sesenta artistas mexicanos en escena se encuentran Mariel Torres, Luisa Buenrostro, Karen Fonseca, Joss Cruz, Tuchi, Lucía López, Alexa Cervantes, Alina Santiago, Viridiana Sevilla, Joaquín Palafox, Jacob Navarro, Alexis Olvera, Zandino Luna, Andrea Cervantes, Natalia Huerta, Luis Sánchez, Patricio Tello, Zeltzin Vargas y Alina Ximena.
“El musical ensalza la celebración por la unión y el amor de estos dos pueblos, quienes seguiremos de la mano durante mucho tiempo y cada día con más fuerza”. DANI ROSADO


“Espero que el público mexicano venga con el corazón abierto a empaparse de emociones. Y a entender que esto no es teatro histórico, sino que es un show”. JESÚS CARMONA
Empaparse de emociones
Respecto al elenco español, una parte ha cambiado con relación a la puesta en escena en Madrid. Es el caso del bailarín Jesús Carmona, que anteriormente dio vida al conquistador Pedro de Alvarado y ahora se mueve entre bambalinas como coreógrafo. “Yo espero que el público mexicano venga con el corazón abierto a empaparse de emociones. Y a entender que esto no es teatro histórico, sino que es un show, es un musical en el que se pasa por muchísimas emociones y sería una pena que se bloquease esa posibilidad emocional por querer ser un libro de historia”, planteó el bailarín a la agencia Efe.
Para el artista andaluz, considerado como uno de los mejores bailarines del mundo en el ámbito del flamenco, este musical es una oportunidad para que el espectador se emocione con una obra de la que está seguro “perdurará”, porque es “algo que nunca se ha visto aquí en México”.
“No podía haber mejor ciudad para presentar Malinche, después de haber sido estrenada en España, que México. El paso natural era venir aquí, pasar esta forma de trasladarlo al otro lado del mar”, señala a Efe el director de escena Javier Navares, colaborador habitual de Cano desde hace más de veinte años, y quien interpreta al gobernador Diego Velázquez.
Navares ve como algo natural que en el elenco primen los artistas mexicanos. “Nosotros, en ese sentido, pretendemos ser lo más honestos posible y hacer justicia a lo que se requiere. Siempre será mejor que un mexicano haga de mexicano y que un español haga de español, aunque en el mundo de la interpretación todos podríamos desarrollar cualquier rol”, sentenció.
Javier Soria Visori es el diseñador del vestuario de Malinche. En las entrañas del Frontón México no deja de crear y dar mantenimiento a los múltiples vestuarios que se utilizan en el montaje en cada función. Plumas, pedrería, tocados y muchos materiales coloridos forman parte del taller artesanal que hace de este departamento todo un espacio creativo. El diseñador explicó al diario Excélsior que, aunque este trabajo está basado en la historia de lo ocurrido, el vestuario y el musical en sí son la propia visión de Nacho Cano. “Es un musical, no un documental, así que nos basamos mucho en la fantasía y en lo que nos gustaría, así como en lo que nos imaginamos que llevaban esos personajes también. Nos basamos en la historia, y en la propia visión de la realidad de Nacho”.
Músicos en escena
Toda la producción es un alarde de medios. Los músicos ocupan dos plataformas, una para percusiones y otra para coros al fondo, en el extremo izquierdo del escenario. En primer término, sobre el proscenio, se instaló un estrado para los teclados.
La primera escena muestra una sencilla localidad en Extremadura, probablemente Medellín. Resuenan cantos en latín y ritmos flamencos. Comienza el año de 1492, porque unas voces a lo lejos dan la noticia de que Granada, el último bastión de los musulmanes en España, ha caído, por lo que los Reyes Católicos podrán ahora apoyar la exploración de nuevas rutas en el mar.
Acto seguido, quien parece ser el joven Hernán Cortés ya está a bordo de un barco rumbo a las Indias. Extrañas figuras celestes acompañan su camino. Llegan a tierra firme y el escenario muestra por primera vez su instalación hidráulica de estanques y cascadas. Una pantalla gigante cubre todo el escenario al fondo. Aparecen subtítulos en la parte superior, en español del lado izquierdo, en inglés a mano derecha.


Cortés mantiene diálogos alegres e ingeniosos con Diego Velázquez, el gobernador de Cuba, y un fraile. Mientras, vemos a Malintzin (Malinche), niña nahua originaria de Veracruz, que es vendida como esclava por su propia familia. Por otra parte, Catalina Suárez, hermana de una novia del gobernador, denuncia a Cortés por haber abusado de ella, lo que le vale ser encarcelado. Finalmente el conquistador accede a casarse con Catalina y parte al frente de una expedición a Yucatán.
Sacrificio humano
El segundo acto comienza con la representación de un sacrificio humano en lo alto de una pirámide. Con absoluto rigor histórico, la gran construcción que se alza sobre el escenario resulta tener dos cuerpos, uno dedicado a Huitzilopochtli y el otro a Tláloc. Mientras, Hernán Cortés ha llegado a Cozumel, donde conocerá a fray Gerónimo de Aguilar, clérigo sevillano que había llegado a la península en 1511, cuando fue hecho prisionero por los mayas. En un principio, De Aguilar sirvió a Cortés como intérprete, al hablar maya.
En su documentada biografía de Hernán Cortés, José Luis Martínez da cuenta de que el 15 de abril de 1519, en Tabasco, Malintzin (Malinche) fue regalada al conquistador con otras 19 mujeres. La joven debió haber tenido apenas 15 años. “Con aquel presente, los tabasqueños ‘pensaban hacerles gran servicio’, como los veían sin mujeres, y porque cada día es menester moler y cocer el pan de maíz en que se ocupan mucho tiempo las mujeres. Las veinte indias fueron bautizadas y a Malinali o Malintzin le pusieron por nombre Marina. Cortés las repartió ‘entre ciertos caballeros’ y a esta Marina, luego apodada Malinche, ‘como era de buen parecer, entrometida y desenvuelta’, la dio a Hernández Portocarrero”.

Prosigue José Luis Martínez: “La revelación de la personalidad de doña Marina ocurre pocos días después, ya en San Juan de Ulúa. Cuando llegan los enviados de Motecuhzoma a hablar con Cortés, el intérprete Gerónimo de Aguilar ya no es útil como tal puesto que los mexicas hablan otra lengua, el náhuatl. Andrés de Tapia refiere que vieron que una de las indias obsequiadas en Tabasco ‘les habló, por manera que sabe dos lenguas’; y López de Gómara añade que Cortés, entonces, ‘la tomó aparte con Aguilar y le prometió más que libertad si le trataba verdad entre él y aquellos de su tierra, pues los entendía, y él la quería tener por su faraute y secretaria’ ”.
“Marina será el agente que le permitirá a Cortés la comunicación con el mundo indígena y una de las claves que hicieron posible la conquista de México”.
“Así pudo establecerse aquel doble puente inicial de traductores entre los españoles y los indígenas de habla náhuatl: Marina traducía del náhuatl al maya y Aguilar del maya al español. Pronto Marina aprendió el español y pudo traducirle directamente a Cortés. Ella será el agente que le permitirá la comunicación con el mundo indígena, y más que eso, una mujer de claro talento que, aunado luego a su amor por Cortés, sería una de las claves que hicieron posible la conquista de México”.
La irrupción en escena de bailarinas caracterizadas como caballos, y el enfrentamiento con un jaguar, son dos momentos de una gran belleza plástica. Los equinos son representados con grandes cabezas, como la que cautivó al público de los años ochenta en la obra Equus.

Una nueva raza grande y libre
El momento del amor y la unión entre Malinche y Cortés es representado con ambos personajes en uno de los estanques sobre el escenario. “¡Una nueva raza nacerá de nuestra unión, una nueva raza, grande, libre y mágica!”, exclaman. A fines de 1522, la Malinche dio al conquistador su primer hijo varón, que se llamó Martín, como su abuelo español, que representa el primer mestizo. Cortés tomó a su cargo la educación de Martín, a quien años más tarde hará legitimar.
Tras representar con sencillez el mercado de Tlatelolco y el acto en el que Moctezuma rinde vasallaje al rey Carlos V, los acontecimientos se precipitan. Llega la noticia del arribo de Pánfilo de Narváez a Veracruz, lo que obliga a Cortés a salir a su encuentro, dejando a Pedro de Alvarado al mando. La intolerancia y los excesos de este provocarán la matanza del Templo Mayor, para desesperación de Cortés a su regreso. Moctezuma es apedreado por su pueblo y los españoles deben huir en la Noche Triste.
El final del musical lo protagonizan Moctezuma y Orteguilla, el paje de Hernán Cortés, quienes han muerto en la refriega. Una enorme cruz baja del techo. Moctezuma y Orteguilla han subido al cielo y desde ahí se dirigen a fray Gerónimo de Aguilar a quien le dicen: “La muerte es solo ausencia de luz”.
Tras lo cual, toda la compañía sale a escena cantando “México mágico”:
Fuentes consultadas
Barjau, Luis. La conquista de la Malinche: la verdad acerca de la mujer que fundó el mestizaje en México. Ciudad de México: Conaculta, 2016.
Benavente, fray Toribio de (Motolinía). Historia de los indios de la Nueva España. Ed. de Mercedes Serna Arnaiz y Bernat Castany Prado. Madrid: RAE, CECE, 2014.
Casa de América. Nacho Cano presenta Malinche, el musical. Madrid, 17 de octubre de 2022.
Cortés, Hernán. Segunda Carta de Relación enviada a S. M. el Imperador. Sevilla: Juan Cromberger, 1522.
Díaz del Castillo, Bernal. Historia verdadera de la conquista de la Nueva España. México: Editorial Pedro Robredo, 1939.
Juárez, Ana S., “David Hatchwell, la fortuna de origen israelí detrás del nuevo musical de Nacho Cano”, La Razón(diario), Madrid, 6 de octubre de 2021.
Martínez, José Luis. Hernán Cortés. Ciudad de México: Fondo de Cultura Económica / UNAM, 2015.
Mónaco Felipe, Paula. “Revivir las glorias del Frontón México”, La Jornada (diario), Ciudad de México, 28 de noviembre de 2009.
Sahagún, fray Bernardino de. Historia general de las cosas de Nueva España. México: Editorial Pedro Robredo, 1938.